Plantas y flores perennes para el balcón: Cómo cuidarlas
¿Eres un amante de la naturaleza? A continuación, te presentamos diferentes clases de plantas y flores que puedes cultivar en el exterior de tu casa, concretamente, en la terraza o el balcón.
Hablamos de la planta más utilizada en balcones y terrazas. Existen muchas variedades de esta planta y aportan un alegre toque de color en el exterior de tu hogar. Durante los meses más cálidos es necesario regarlos con mayor regularidad, evitando un exceso de agua que las pudiera pudrir. Además, pueden estar expuestas a la luz solar durante la primavera, verano y el otoño. Sin embargo, durante el invierno lo más conveniente es taparlos para protegerlos de las heladas.
Se trata de un flor de gran tamaño y diferentes variedades cromáticas que abarcan desde el lila al azul o el blanco con toques verdosos. La hortensia es una flor, sobre todo, de verano que responde mejor a los lugares con sombra donde no esté expuesta directamente a la luz solar.
Asimismo, debe regarse regularmente durante todo el año, asegurándose de que no se riegue en exceso.
El ciclamen
Nos centramos ahora una flor delicada y que presenta forma de corazón. Antes de sembrarlas tienes que localizar un lugar en el que la luz solar no incida directamente en ellas. Durante el periodo de floración es el momento en que éstas necesitarán una mayor atención. Debes regarlas regularmente, pero sin excesos. Por su parte, durante el verano tan solo debes regarlas ocasionalmente. Asimismo, en el momento que detectes una hoja o flor marchita retírala para evitar que el resta de la planta se vea igualmente infectada.
El arce enano
Esta pequeña y singular planta crece mejor en un lugar protegido de las corrientes de aire y sol. Entre las peculiaridades del arce enano se encuentra su capacidad para tolerar el frío y las heladas, y requerir mucha agua durante los meses más cálidos del verano. Respecto a la poda debes realizarla en primavera.
El brezo
Se trata de un rústico arbusto de hoja perenne que da vida a unas hermosas y pequeñas flores blancas durante los meses de invierno. El brezo acepta la luz y no necesita demasiada agua. Asimismo es conveniente emplear fertilizantes cada tres semanas durante el periodo de floración para evitar plagas inesperadas.
Es el turno de una planta conocida por sus propiedades terapéuticas. Se trata, además, de una planta resistente al frío, que durante los meses de verano se cubre de flores de color amarillo brillante. La rhodiola rosea acepta la exposición a la luz solar, al menos durante unas horas al día. Debes, además, regarla en abundancia, pero solo cuando la tierra esté muy seca.
Fuente: ellahoy
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