Todo lo que tenés que saber para cultivar Gazanias en tu casa
Si tenemos Gazanias en el jardín, probablemente tengamos flores todo el año. Aunque será durante la primavera y el verano cuando su floración estalle.
Se trata de una planta originaria de África que alcanza los 20 cm. de alto y sus hojas, de color verde brillante, se presentan en forma de roseta. Sus flores son parecidas a las de una Margarita, aunque su tamaño es mayor. Tienen la particularidad de cerrarse durante la noche, así que solo apreciaremos su belleza durante el día. Su gama de colores es amplia, y en estado puro encontramos amarillas y naranjas. Pero las versiones combinadas son muchísimas: blancas con líneas rosadas, amarillas con líneas rojas, naranjas con las puntas de lo pétalos amarillos. ¡Las combinaciones son infinitas!
Podemos obtener estas plantas a partir de semillas en suelo directo o en almácigos durante la primavera y el verano. Tambien se pueden conseguir fácilmente los plantines en viveros. El mejor lugar para plantar Gazanias es aquel que tenga mucho sol durante el día, ya que sino las flores no se abrirán. Sus matas son rastreras y muy cubritivas, lo que las hace ideales para tapizar macizos y borduras. Si no tenés jardín y solo podés tener plantas en macetas, ¡no te preocupes! Podés tener Gazanias sin problemas.
¿Un consejo? Si bien es una planta resistente a las bajas temperaturas, es aconsejable protegerla de las heladas en el invierno.
Esta planta no tolera la humedad excesiva. Si bien en verano los riegos deberán ser frecuentes, tendrás que asegurarte previamente de que el suelo esté seco. Cuidado: el exceso de agua puede ser perjudicial pero la falta de ella también.
Suelo
Sus requerimientos en cuanto al suelo no son demasiados. Prefiere suelos ligeros, con buen drenaje y con buena cantidad de nutrientes. En época de gran producción floral, es recomendable abonar el suelo con fertilizantes en el riego.
A medida que las flores se marchitan, habrá que ir sacándolas para que la floración no disminuya y no pierda la continuidad. Lo mismo habrá que hacer con las hojas cuando empiecen a amarillear o ponerse feas. Ya que no solo disminuyen la producción, sino que también le dan a la planta un aspecto feo.
Son plantas de vida corta, lo ideal es renovarlas cada 4 o 5 años. Esto se puede hacer por esqueje durante el otoño o por semilla a finales del invierno o principio de la primavera, una vez que hayan pasado las heladas.
¿Te animás a incluirlas en tu jardín?
Fuente: VIX
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