RECICLAR BOTES DE CRISTAL
A la hora de decorar nuestro hogar, la creatividad será nuestra mejor aliada. Pero a veces nos resulta difícil saber qué hacer o por dónde empezar. No hace falta que hagamos grandes cambios o que busquemos grandes ideas, sólo con las cosas más sencillas y elementos que estén a nuestro alcance podemos crear accesorios sencillos y muy decorativos, con el valor añadido y la satisfacción de haberlos elaborado con nuestras propias manos.
Una idea que se está poniendo muy de moda últimamente es la de reciclar elementos de la vida cotidiana, como botes de cristal, latas, pajitas… y convertirlos en accesorios para la decoración de nuestros hogares de una forma sencilla y barata, sólo necesitamos nuestra imaginación.
Por eso hoy voy a hablar de la decoración con botes de cristal, sí esos botes donde guardamos los garbanzos, el café, el arroz o las alcachofas, ya que todos tenemos en la cocina un gran número de botes que hemos ido acumulando porque no queremos tirar, pero tampoco sabemos muy bien qué hacer con ellos. Pues aquí está la solución y la verdad es que las opciones son casi infinitas.
Seguro que después de leer esto no te puedes resistir a buscar por los armarios, alacenas o trasteros todos los botes de cristal que hayas podido ir acumulando a lo largo del tiempo. Los botes de cristal nos ofrecen un amplio abanico de posibilidades en cuanto a decoración se refiere, y nos pueden servir para decorar prácticamente cualquier estancia o zona porque ¿para qué gastarnos dinero en decoración cuando podemos hacerla nosotros mismos?
Una de las ideas que más me gustan es la de utilizarlos como candelabro, de una forma muy fácil y con un resultado ideal. Sólo tenemos que llenar el bote de agua y colocar unavelita flotante dentro, luego la decoración del bote ya corre a cargo de cada uno, según nuestros gustos podemos forrarlos con diferentes telas, añadir un lacito…
A quien le guste el scrapbooking podrá hacer las mil y una maravillas con estos botecitos. Desde pegar diferentes telas, coser botones, pegar objetos bonitos, utilizar cuerda, lazos… hay cientos de posibilidades. Es importante tener en cuenta a qué se va a destinar el bote. Por ejemplo, si vamos a guardar caramelos quizás le queramos dar un toque más dulce e infantil. Si queremos regalarlo como un recuerdo donde en el interior haya fotografías de nuestra pareja o amigos, habrá que darle un toque mucho más personalizado. Se puede utilizar para almacenar cosas de costura, material de manualidades, monedas o simplemente para guardar los macarrones, las tejas o el arroz de una forma mucho más divertida.
Otra idea de lo más original es convertir nuestros botes en un jarrón, claro que decorándolos antes, como en el caso de la imagen, en la que de una forma muy original han utilizado una llave antigua para decorar nuestro jarrón improvisado, y después colocarle las flores, obteniendo un resultado perfecto.
En fin, en cuanto a decoración con botes de cristal todo vale, podemos simplemente coger nuestros antiguos botes que están tristemente almacenados en alguna despensa y reconvertirlos en otros más bonitos y personalizados, simplemente para decorar algún rinconcito de la cocina, del cuarto de baño o de cualquier estancia de la casa. Es tan sencillo como coger cualquier retal de tela viejo que tengamos por casa o algún pedacito de cuerda y dar rienda suelta a nuestra imaginación, sin límites, o bien, si tenemos una vena aún más artística podemos incluso pintarlos, tapa incluida, a nuestro gusto.
Y también podemos recurrir a decorar de una forma similar varios botes de distintos tamaños y agruparlos, creando una especie de centro de mesa o de conjunto decorativo para algún espacio vacío de nuestro hogar. Por ejemplo poniendo unas flores en algunos o cualquier cosa que se nos ocurra, la imaginación pone los límites.
Espero que os haya gustado esta dulce y bonita manualidad. Animaros a probar que seguro os salen unas preciosas creaciones
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