Tarta de Turrón Blando



Tarta de Turrón Blando



Porciones / número de personas: 6 personas
Tiempo de Preparación: 30 minutos
Tiempo de cocción: 20 minutos
Categoría: Postres
Dificultad: Fácil





Introducción

La tarta de turrón blando se realiza en las fechas navideñas, que es cuando llegan a casa los turrones, o bien durante los meses posteriores, para aprovechar el turrón de las Fiestas que ha sobrado en los hogares. Es un postre calórico, pero fácil de hacer.


Ingredientes para preparar Tarta de Turrón Blando

550 ml. de leche
250 gr. de galletas
Medio litro de nata
80 gr. de mantequilla
300 gr. de turrón blando
120 gr. de almendra crocante
2 sobres de cuajada



Cómo Preparar Tarta de Turrón Blando

Lo primero que debemos hacer es poner el horno a precalentar a 180º C, con calor por arriba y por abajo.

Cogemos las galletas, que pueden ser tipo María o Digestive, y las picamos hasta convertirlas en polvo, o bien las deshacemos lo máximo posible con las manos. Añadimos la almendra crocante, reservando unos 40 gramos para la decoración final de la tarta.

Cogemos la mantequilla y la ponemos unos segundos en el microondas, hasta que se derrita. Después, la mezclamos con el polvo de galleta, 50 ml. de leche entera y la almendra crocante, y mezclamos con las manos hasta formar una pasta homogénea.

Cogemos un molde de silicona redondo y rellenamos la parte inferior con la pasta que hemos formado, hasta que esté cubierta toda la superficie. Después, metemos el molde en el horno unos diez minutos. Sacamos y reservamos.

Ponemos una cacerola a fuego medio y echamos la nata y la leche. Cuando veamos que comienza a hervir añadimos el turrón, que habremos deshecho previamente con los dedos hasta formar trozos lo más pequeños posibles. Damos vueltas con una cuchara de madera constantemente.

Aparte, en un bol, echamos 50 ml. de leche, lo suficiente para diluir la cuajada. La incorporaremos a la cacerola y mantendremos ésta en el fuego, hasta que comience a hervir, momento en el cual retiraremos la olla del fuego.

Volcamos el contenido de la cacerola en el molde con la masa de galleta que tenemos reservado y dejamos que se enfríe.

Cuando esté tibio lo ponemos a enfriar definitivamente en el frigorífico. A la hora de servir emplatamos la tarta y la adornamos con almendra crocante en su superficie, que puede ir acompañada de virutas de chocolate o nata montada. ¡Riquísima!




Fuente: Recetario-Cocina.com

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