Bizcocho Genovés
Porciones / número de personas: 6 personas
Tiempo de Preparación: 40 minutos
Tiempo de cocción: 15 minutos
Categoría: Postres
Dificultad: Fácil
El bizcocho genovés se utiliza, normalmente, como base de una tarta que luego decoraremos, aunque también podemos utilizarlo como bizcocho para mojar en el café del desayuno o la merienda. Debe su nombre a sus orígenes italianos y es muy sano al no llevar grasas.
Ingredientes para preparar Bizcocho Genovés
125 gr. de azúcar
4 huevos
125 gr. de harina
Sal
Cómo Preparar Bizcocho Genovés
En primer lugar, cogemos un bol grande y partimos allí los huevos. Añadimos el azúcar y una pizca de sal.
Nuestro objetivo es montar los huevos por lo que utilizaremos un robot de cocina, colocando la velocidad de las varillas al máximo. Unos diez minutos bastarán.
Si no tenemos robot de cocina podremos hacerlo colocando el bol al baño maría. Batiremos hasta que la mezcla haya triplicado su volumen. Sabremos que está hecho cuando levantamos las varillas y vemos que la mezcla forma un pequeño dibujo sobre la superficie del resto de mezcla que tenemos en el bol.
A continuación incorporamos la harina poco a poco. Estaremos moviendo toda la masa con una cuchara de madera permanentemente, para que no queden grumos.
Vertemos la masa en un molde de silicona dejando la superficie completamente lisa, lo que lograremos con la ayuda de la cuchara que hemos utilizado para remover.
Precalentamos el horno a 200º C y, cuando esté caliente, metemos el molde, durante unos 15 minutos aproximadamente. Sabremos que el bizcocho está listo si introducimos un cuchillo y sale limpio. Después, lo dejamos enfriar unos minutos y procedemos a desmoldarlo.
Si lo vamos a utilizar para rellenar, cuando esté frío lo envolvemos en film transparente y lo dejamos 24 horas en el frigorífico para que gane consistencia. Y si lo vamos a consumir tal cual, ya podemos empezar.
En primer lugar, cogemos un bol grande y partimos allí los huevos. Añadimos el azúcar y una pizca de sal.
Nuestro objetivo es montar los huevos por lo que utilizaremos un robot de cocina, colocando la velocidad de las varillas al máximo. Unos diez minutos bastarán.
Si no tenemos robot de cocina podremos hacerlo colocando el bol al baño maría. Batiremos hasta que la mezcla haya triplicado su volumen. Sabremos que está hecho cuando levantamos las varillas y vemos que la mezcla forma un pequeño dibujo sobre la superficie del resto de mezcla que tenemos en el bol.
A continuación incorporamos la harina poco a poco. Estaremos moviendo toda la masa con una cuchara de madera permanentemente, para que no queden grumos.
Vertemos la masa en un molde de silicona dejando la superficie completamente lisa, lo que lograremos con la ayuda de la cuchara que hemos utilizado para remover.
Precalentamos el horno a 200º C y, cuando esté caliente, metemos el molde, durante unos 15 minutos aproximadamente. Sabremos que el bizcocho está listo si introducimos un cuchillo y sale limpio. Después, lo dejamos enfriar unos minutos y procedemos a desmoldarlo.
Si lo vamos a utilizar para rellenar, cuando esté frío lo envolvemos en film transparente y lo dejamos 24 horas en el frigorífico para que gane consistencia. Y si lo vamos a consumir tal cual, ya podemos empezar.
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